Al mismo tiempo que consiguen relajar la musculatura cervical y masticatoria, se evitan los desgastes dentarios. Se pueden mejorar las cefaleas tensionales e incluso acúfenos (ruidos de oído) de mucho tiempo de evolución.
Dependiendo del caso, se utilizarán todo el día o solamente por la noche, durante un periodo variable, habitualmente de algunos meses.